Esto no exige un "plan estratégico" similar al que una empresa o hasta el mismo club pudieran tener, a pesar de que sí tiene algunos elementos similares. La visión estratégica debería reflejar:

  • Un plazo (generalmente de 3 a 5 años);
  • Una visión clara de lo que el equipo logrará dentro del plazo previsto (el objetivo final);
  • Los valores del equipo (principios que guiarán todas las acciones del equipo);
  • Los elementos importantes para alcanzar el éxito (p. ej., selección de jugadores, apoyo médico, acondicionamiento, etc.);
  • Resultados clave para medir el éxito durante el plazo previsto. En general, estos son pasos más pequeños que llevan al objetivo final.

Al preparar una visión estratégica para el equipo, el entrenador también debe evaluar la situación actual del equipo, lo cual puede ser muy difícil si aún no ha trabajado con el mismo. Para informarse, el entrenador podría:

  • Estudiar el rendimiento del equipo en los 3-5 años anteriores;
  • Revisar el perfil de los jugadores (si los jugadores están envejeciendo, ¿puede el equipo sostener sus resultados?);
  • Hablar con los jugadores o entrenadores que hayan trabajado con el equipo (quizá no sea posible hablar con los jugadores o entrenadores actuales).

Existen diversos factores que podrían afectar las posibilidades del entrenador de lograr éxito en el programa, y si bien la influencia del entrenador sobre esos factores podría ser poca, es necesario que los tome en cuenta:

  • Contratos de los jugadores: es poco probable que en su primer año el entrenador tenga el mejor equipo posible, ya que podría llevar una temporada o dos mover a los jugadores.
  • Actitud y cultura: todos los cambios culturales llevan tiempo, y si el entrenador estima que será necesario hacer cambios, es realista creer que el proceso llevará al menos de 1 a 2 años.
  • Recursos del club: los recursos disponibles para un equipo varían considerablemente de un club a otro. Es posible que el club simplemente no pueda destinar al equipo los recursos que desearía el entrenador.
  • Lesiones: el rendimiento de cualquier equipo puede verse afectado por lesiones. Los equipos podrían intentar reducir la posibilidad de que se produzcan determinadas lesiones, pero eso está casi completamente fuera del control del entrenador. El entrenador quizá desee que el equipo se enfrente a las lesiones teniendo jugadores que puedan desempeñarse en una variedad de posiciones o estilos de juego.

En función de la evaluación del entrenador de la situación del equipo y de los factores que pueden afectar el rendimiento, el entrenador selecciona una visión estratégica realista. A pesar de que podría ser tentador (cuando el entrenador quiere que lo contraten) pronosticar sin más que el equipo ganará un campeonato en el futuro cercano, la visión estratégica que fija el entrenador también constituirá la base sobre la cual se evaluará su rendimiento.

El entrenador por sí solo no podrá hacer realidad su visión estratégica, sino que necesita el apoyo del equipo, el club y los actores involucrados para avanzar hacia el objetivo. La visión es un tipo de rompecabezas que define las "piezas" que deben coordinarse. El entrenador debe comunicar la visión y debería:

  • Definir roles;
  • Hacer que las personas asuman la responsabilidad de cumplir con las exigencias de su rol: cuanto más claramente definidos estén los roles, más personas dentro del equipo (incluido el personal de apoyo) velarán por que todos cumplan sus responsabilidades;
  • Reconocer el buen rendimiento, no solamente evaluar el éxito en función de la cantidad de partidos ganados.

Ganar o perder partidos específicos es un indicador que la mayoría de las personas usan para evaluar el rendimiento de un equipo y su entrenador.

Al evaluar el rendimiento del equipo, el entrenador debe utilizar métricas que sean más significativas para lograr alcanzar el objetivo final dentro del plazo.

La visión del entrenador para el equipo debería permanecer relativamente sin cambios, a pesar de que las estrategias y los plazos ciertamente podrían cambiar a medida que surgen nuevas circunstancias. Algunos jugadores jóvenes podrían desarrollarse antes de lo esperado, o lesiones graves podrían tener consecuencias sobre el rendimiento en determinado año.