Existen algunas técnicas que pueden ayudar a los jugadores a tener más éxito dentro de “la zona pintada” y el entrenador puede brindar retroalimentación a los jugadores respecto de estas técnicas en un momento adecuado. Este tipo de instrucción es generalmente más eficaz al responder a situaciones en las que el jugador se ve involucrado. 

Tiro estilo “choque los 5” con continuación del movimiento del brazo

Alrededor de la canasta, los jugadores por lo general tiran desde distintos ángulos y posiciones. Deben ser competentes tanto con la mano izquierda como con la derecha, pero a veces tiran estando orientados a la canasta, y a veces al lado de esta, y otras veces, de espaldas a la canasta.

Algunos jugadores tienen dificultades para soltar su tiro, el que tradicionalmente enseñamos como una “flexión” (en la que la muñeca se dobla y los dedos apuntan hacia abajo). En cambio, alrededor de la canasta, les resulta más fácil a los jugadores soltar el balón con los dedos hacia arriba, terminando el movimiento con la muñeca recta.

Este tipo de lanzamiento (un tiro estilo “choque los 5” con continuación del movimiento del brazo) debería igualmente dar efecto de giro hacia atrás al balón, ya que esto es importante para “suavizar” el tiro. Es particularmente útil cuando el jugador no está orientado directamente a la canasta.

Tirar saltando con el pie incorrecto

La zona (de tres segundos), por lo general, es un área congestionada, y cuantos menos botes y pasos haga un jugador, mejores serán los resultados. Esto también significa que, a veces, no puede usar el juego de pies “perfecto” para hacer un tiro en bandeja y, en cambio, necesita saltar con el pie del mismo lado desde el cual tira.

Los entrenadores no deberían corregir automáticamente el trabajo de piernas incorrecto de un atleta, pero sí debe verificar que no infrinja las reglas. De manera similar, un jugador puede tirar con la mano derecha del lado izquierdo de la canasta y, aunque no enseñamos esto, puede que sea el tiro adecuado con respecto a la posición en la cancha y la posición de los defensores (por ejemplo, al entrar a canasta junto a la línea de fondo, la mano izquierda del jugador puede estar detrás del tablero).

Si el entrenador cree que la técnica tiene desventajas, puede hablar con el atleta sobre eso y podría incluso diseñar una actividad para “probar” la técnica. Por ejemplo, un jugador puede llegar alrededor de un defensor con su brazo para lanzar un tiro “desde abajo”, lo que probablemente no sería exitoso si hubiera un segundo defensor cerca. El entrenador podría diseñar una actividad que tenga un segundo defensor, sin decirles a los jugadores. Si el atacante intenta nuevamente usar el movimiento y es bloqueado, el entrenador puede hablar con el defensor sobre el motivo por el que no tuvo éxito la segunda vez.

Si el jugador sabe que funcionará en una circunstancia (sin ayuda), pero no en otra (con ayuda), y sabe cómo identificar cada situación, se le debería permitir la libertad de usar una u otra opción según sea necesario.

Pivotes, fintas y tiro con un pie

Una causa por la que se necesita tirar saltando con el “pie incorrecto” es que el pie de pivote con el que el jugador comenzó quizás no le permite al jugador (dada la congestión de la zona (de tres segundos)) hacer la misma cantidad de botes/pasos para hacer el juego de pies correcto.

Es muy importante que los atacantes aprendan la importancia de usar pivotes y fintas para crear espacio para tirar (o pasar). Por lo general, pivotar sobre el talón y girar el pie hará que sea más fácil para el atacante dar un paso para pasar al defensor. Poder tirar saltando en un pie es muy importante cuando el jugador tiene el balón muerto, ya que aún puede dar un paso para pasar al defensor. En el escaso espacio de la zona (de tres segundos), probablemente no tenga la oportunidad de juntar los pies como normalmente lo haría antes de tirar.

Cuando se pivota o se da un paso, el atacante debería mantener el torso superior alto y no agacharse. Esto hace que mire para arriba (lo cual es importante para identificar posibles pases). También es importante que mantenga las rodillas flexionadas y el peso hacia abajo. Si extiende las piernas, no tendrá tanto equilibrio ni podrá dar un paso largo para pasar al defensor.

Alejarse de la canasta

Pivotar con frecuencia alejándose de la canasta ayudará a crear espacio para poder tirar, porque el jugador ahora está al lado del defensor (de manera que con el “ancho” de su cuerpo se separa del defensor), y es importante que pueda tirar con cualquiera de las manos desde dentro de la zona (de tres segundos).

En la zona (de tres segundos), los defensores también pueden “seguir” o intentar alcanzar el balón cuando el defensor pivota para alejarse, y esto crea una oportunidad para pasarlo (por lo general, usando un pivote reverso).

Finta lenta, movimiento rápido

Las fintas de tiro, en particular, pueden ser muy eficaces dentro de la zona (de tres segundos), ya que por lo general los defensores buscan bloquear el tiro y para ello saltan. Cuando han saltado, ya no pueden defender al jugador. Sin embargo, un error común es hacer la finta de tiro de alguna de estas dos maneras:

  • demasiado rápido, y desplazarse hacia el próximo movimiento antes de que el defensor haya tenido tiempo de reaccionar a la finta; o
  • demasiado pequeño, sin levantar el balón por encima de la cabeza (¡lo cual es obvio para el defensor!). Si la finta es demasiado pequeña, es posible que el defensor no lo detecte y, por lo tanto, no reaccione.

Mantener el balón en alto

Quizás lo más importante ante la congestión de la zona (de tres segundos) es mantener el balón en alto. Mantener el balón a la altura de los hombros (o de la frente) garantizará que sea difícil para los defensores dar un manotazo al balón o tomar posesión de este. Si el balón se sostiene en alto, hará que los codos del atacante sobresalgan, lo que ayudará a alejar al defensor.

Es importante tener en cuenta que el atacante no debería interponer los codos ni intentar hacer contacto, no obstante, levantar los codos (dentro de su cilindro imaginario) está permitido y ayudará a aliviar la presión.

Sin duda, cuantos más entrenadores creen situaciones con oposición en la práctica, mejor desarrollarán los jugadores sus habilidades de tiro en la zona interior. Esa presión puede ser relativamente pasiva (pararse en frente de un jugador para que deba pasar), o simular una presión similar a la de un partido.