De acuerdo con el movimiento del Comité Olímpico Internacional y desde 2004 con la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), la FIBA ha estado activamente involucrada en la lucha contra el dopaje en el básquetbol. Desde 1989, se realizan controles de dopaje de manera habitual y cada vez en mayor cantidad en los eventos de la FIBA.

En 2009, la FIBA comenzó a implementar su propio programa de pruebas de dopaje Fuera de Competencia.

A medida que cada vez más países ratifican la Convención Internacional contra el Dopaje en los Deportes de la UNESCO, la cooperación de la FIBA con sus propias federaciones nacionales y las organizaciones nacionales antidopaje en esta área se ha visto constantemente reforzada.

El Rincón Médico del sitio web de la FIBA (www.fiba.com) es una herramienta muy útil para la comunicación y la cooperación con todos los involucrados, y en él se puede acceder a información pormenorizada y actualizada sobre las actividades de control de dopaje de la FIBA.

Si bien en general se conocen los aspectos de injusticia del dopaje, suele haber un vacío de conocimiento en cuanto a los peligros a los que se enfrentan los atletas y la importancia de cultivar un estilo de vida saludable. La FIBA incluyó una serie de videos cortos en su página de YouTube y en su sitio web (www.cleangame.fiba.com) con información brindada por algunas de las principales estrellas del básquetbol de utilidad para los jugadores de todas las edades y niveles.

Los entrenadores tienen el deber de difundir entre sus atletas la importancia de practicar deportes sin recurrir al dopaje o a las sustancias prohibidas. También deben asegurarse de que los atletas comprendan que existe un proceso por el cual el uso de una sustancia prohibida puede ser aprobado en casos de prescripción médica (excepción de uso terapéutico). En el sitio web de la FIBA los atletas pueden acceder a más información. Además, es importante que conversen sobre todas sus dudas con su médico.

“Lo mejor de ser atleta es estar a la altura del desafío, hacer el mejor trabajo posible en las circunstancias dadas y disfrutar del proceso. La celebración del espíritu, cuerpo y mente humanos es lo que llamamos el ‘espíritu deportista’, y se caracteriza por la salud, el juego limpio, la honradez, el respeto por uno mismo y por los otros, el coraje y la dedicación. El dopaje en el deporte es la antítesis absoluta del espíritu deportista. El dopaje destruye todo lo que el deporte tiene de bueno y de noble. Pone en peligro la salud y el bienestar de los atletas y socava la confianza del público. Además de arriesgarse a sufrir graves consecuencias en la salud, los atletas con dopaje positivo dañan su buen nombre y honor, y se arriesgan a perder su empleo”.1

¿Cómo funciona el sistema de control de dopaje de la WADA?

La Agencia Mundial Antidopaje lleva una lista de sustancias y métodos prohibidos, en la que se incluyen aquellas sustancias que reúnen dos de los tres criterios que siguen:

  • sirven para mejorar el rendimiento;
  • ponen en riesgo la salud del atleta; y
  • su uso es contrario al espíritu deportista.

Los atletas que infringen el Código Antidopaje son penados con una prohibición de competir por dos años.

Se aplica la regla de “responsabilidad objetiva”, de manera que se considera que hubo una infracción si se encuentra alguna sustancia prohibida en una muestra (p. ej., de sangre u orina) entregada por un atleta.

Carece de importancia si el atleta usó la sustancia intencionalmente o no.

Los entrenadores no deben asesorar a los jugadores sobre qué medicamentos o suplementos pueden usar o no, sino que deben asegurarse de que los jugadores estén informados sobre su responsabilidad en virtud del Código Antidopaje y de que sepan dónde pueden pedir asesoramiento si lo necesitan.

1
Elizabeth Hunter, “Anti-Doping: It’s a Global Campaign”, FIBA Assist.